El aceite es nuestro aderezo por excelencia. Añade sabor a las comidas y sirve para cocinar, y aporta nutrientes que nos dan energía y contribuyen al buen funcionamiento de nuestro organismo. El aceite ayuda a mantener el equilibrio de grasas y colesterol en sangre y contiene buenas dosis de vitaminas A, D, E y K.De hecho, en el pasado 2013, un estudio clínico español llamado Predimed (Prevención con Dieta Mediterránea) demostraba de nuevo sus saludables efectos. Pero, ¿hay aceites mejores y peores?
Los aceites pueden contener distintos tipos de grasas. Las menos saludables son lassaturadas y las trans. Evítalas al máximo, ya que son las más densas y difíciles de eliminar para el cuerpo, y eso puede provocar problemas cardiovasculares. Se encuentran en productos como la manteca o el sebo, y en la bollería industrial y muchos alimentos precocinados. Más allá de los conocidos… Existe una gran variedad de aceites más allá de los que todos conocemos. Te presentamos algunos para que enriquezcas tus recetas.
Aceite de oliva: Es el producto estrella de la dieta mediterránea y es el aceite más saludable. Es el más recomendado para aliñar (por sus propiedades nutricionales) y freír (soporta muy bien las altas temperaturas y no provoca reacciones tóxicas a pesar de usarlo varias veces). Es rico en vitamina E y grasas saludables, que nos ayudan a envejecer mejor y a reducir el colesterol malo. El aceite de oliva virgen extra es la variedad de más calidad.
Si echas un vistazo a algunas de las recetas de Chef Plus, como el bizcocho de yogur, las croquetas caseras o las albóndigas a la menta, verás que hemos utilizado aceite de girasol. Aprovecha la variedad de aceites para sorprender al paladar.